Como ya he contado en ocasiones en el blog, mis hijos crecen bilingües, en alemán y español. Yo soy española, mi marido alemán y vivimos en Alemania, donde han nacido nuestros tres hijos, que han sido escolarizados en alemán. Es decir el alemán es su "idioma mayoritario" y el español su "idioma minoritario" siendo la fuente principal de español en su vida cotidiana yo. Hace ya mucho tiempo que descubrí el maravilloso trabajo sobre crianza bilingüe de Adam Beck, del que recomiendo tanto su blog Bilingual Monkeys, el foro que ha creado Bilingual Zoo, como sus dos libros sobre crianza bilingüe: Maximize your childs bilingual ability y Bilingual Success Stories Around the World (en este último está recogida también nuestra historia, que también puede leerse en inglés en el blog de Adam en este post)
En el foro de Bilingual Zoo, Adam propone 14 "desafíos" en la educación bilingüe, y he decidido ir siguiendolos uno a uno y ver como los podemos aplicar a nuestra familia en nuestra situación actual.
Y empezamos por el primero: Lee a tus hijos todos los días.
Yo he leído y leo a mis hijos mucho en voz alta, y creo firmemente que ha sido uno de los factores clave del éxito de su bilingüismo, además de ser momentos que disfruto mucho con ellos (y ellos conmigo porque no me dejan que se me pase el leerles).
Como lo hago yo:
- Leo un libro diferente a cada uno, aunque si quieren pueden escuchar lo que leo a sus hermanos. La única excepción la hago con el mayor si le leo algo que no me parece apropiado para sus hermanos menores, le leo cuando no estén presentes.
- Nos alternamos para escoger el libro que les leo, una vez escogen ellos, una yo. Yo escojo libros que se salgan de lo que suelen leer ellos por su cuenta. Por ejemplo mi hijo mayor lee sobretodo fantasía y ciencia ficción, así que yo le leo libros de otros géneros que creo que le van a gustar pero que es muy improbable que escogiera el para leerselos por su cuenta.
- Les leo durante el desayuno, primero al mayor que como tiene que salir de casa más temprano que sus hermanos desayuna antes y luego a los otros dos que desayunan juntos. Les leo también después de cenar. Y si tenemos algún momento de espera, que se preste a ello, pues lo aprovecho también. Y si en algún momento me vienen a pedir que les lea un ratito, le doy prioridad y dejo lo que sea para leer aunque sean 5 minutos.
- El nivel de complejidad de textos que se puede leer leyendo en voz alta es mucho mayor al que pueden leer ellos solos. Así como los temas que sobre los que se puede leer, porque la lectura conjunta se puede parar el cualquier momento para preguntar, comentar, reflexionar...
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